Violencia Policial en el Barrio De Barracas

TRABAJADORES AMENAZADOS – ZONA LIBERADA – FUERZAS DE SEGURIDAD - HOSTIGAMIENTO

 

  El pasado jueves 21 de abril, aproximadamente a las 20hs, dos trabajadores de la Casa de la Cultura de la Villa 21-24, al retirarse de la misma después de su jornada laboral, advierten cómo un comando de prefectos hostiga a cuatro jóvenes en la esquina de Iriarte y Montesquieu, golpeándolos con sus bastones, alegando haber sido insultados.

  Ante esta situación, dichos trabajadores deciden intervenir y piden que los prefectos cesen en la agresión.

 

Considerando lo sucedido y visto:

  Que a partir de ese momento, los integrantes de las fuerzas de seguridad comienzan a golpearlos, acusándolos de "ser sindicalistas" y de "haberse metido”.

  Que estas agresiones fueron acompañadas del despliegue de un descomunal operativo de la Policial Federal con aproximadamente 80 efectivos que requisaron a los presentes (dejándolos prácticamente desnudos a la vista de todos los vecinos allí presentes), los golpearon e insultaron reiteradamente.

  Que lamentablemente éste no es un hecho aislado sino parte de un accionar violento de las fuerzas de seguridad, que suelen ensañarse con los sectores más vulnerables a través de prácticas ejercidas de manera discriminatoria.

  Que la situación, que de por sí no es novedosa, se torna más grave cuando los efectivos los amenazan, diciéndoles que "ya los iban a agarrar solos" y dándoles información de dónde viven, donde trabajan y de sus movimientos en el barrio.

  Que la Facultad de Filosofía y Letras a través de su Centro de Innovación y Desarrollo de la Acción Comunitaria (CIDAC) trabaja con numerosas organizaciones sociales, políticas y culturales de la Villa 21-24, desarrollando diversos proyectos y actividades.

  Que el hecho de que se comience a criminalizar a aquellos que trabajan para mejorar las condiciones de vida de un barrio preocupa seriamente y nos retrotrae a los tiempos más oscuros de nuestra historia, en los que se estigmatizaba y reprimía la participación social y política, y durante los cuales la frase “no te metas” se convirtió en paradigma de las relaciones sociales, favoreciendo el aislamiento y ruptura de las prácticas de solidaridad popular.

  Que el Estado en estos últimos años había avanzado hacia tratamientos más democráticos de la protesta social y que, por ende, no puede volver a apostar a la represión y a la censura como herramientas para aplacar el disenso, ni buscar en los jóvenes de los barrios más postergados el chivo expiatorio que oculte su responsabilidad en el crecimiento de la pobreza.

  Que la participación comunitaria jamás puede ser perseguida, criminalizada o reprimida por un Estado democrático.

 

  Por todo ello, la Facultad de Filosofía y Letras resuelve manifestar su profunda preocupación ante los hechos de violencia institucional en la villa 21-24 de Barracas de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y solidarizarse con quienes fueron agredidos. Y se compromete a intensificar los esfuerzos que ya venía realizando a través de su Observatorio Universitario de Violencia Institucional (creado por Resolución CD 2012/2015) para profundizar los debates acerca de la necesidad de contar con fuerzas de seguridad democráticas, respetuosas de los derechos humanos y garantes de la participación comunitaria.